Los daimieleños no consiguieron competir ante el sólido líder de la clasificación y volvieron de Gran Canaria con las manos vacías. La superioridad física de los locales marcó el encuentro desde el inicio y tan sólo en la segunda parte, ya con el marcador muy cuesta arriba, se pudo ver algo mejor al equipo de Fernando García Alhambra.
97- Gran Canaria (Gabi Alonso): Javi López (6), Uta (7), Balcerowski (5), Lazaro (8) y Bernacer (9). También jugaron Miguel Serrano (12), Paulo (10), Kljajic (17), Ardanza (17) y Diop (6).
59- Autocares Rodríguez Daimiel (Fernando García): Holliday (15), Otero (12), Ramos (5), Elias (8) y Hervás (8). También jugaron Asenjo (0), David Sánchez-Crespo (2), Edu (5), Fran (0), Carlos Sánchez y Rubén Bruno (2).
Parciales y totales: 27-13; 32-10 (59-23); 13-16 (72-39); 25-20 (97-59).
El partido no era nada fácil, se visitaba al líder de la categoría. Un equipo que tan sólo ha perdido 3 encuentros en lo que va de año y que en su casa se muestra intratable con un pleno de victorias. Aún así, en el inicio del encuentro, los daimieleños se mantenían el partido gracias al acierto de Anthony Holliday. Pero en los dos últimos minutos del primer cuarto con 19-13, tres pérdidas y una canasta sobre la bocina establecían un parcial de 8-0 para los canarios que conseguían abrir brecha (27-13).
A partir de aquí el Gran Canaria se sintió mucho más cómodo sobre la pista, aprovechando que el Autocares Rodríguez Daimiel no conseguía anotar sus tiros liberados para ir aumentando la distancia paulatinamente. No era el día de los machegos, que se marchaban al descanso con el partido prácticamente decidido salvo sorpresa mayúscula.
Tras el descanso el equipo salió con la máxima de borrar la mala imagen mostrada durante la primera parte. Fernando García Alhambra movió continuamente el banquillo buscando frescura en sus jugadores y estos respondieron. Buenos minutos de Luis Otero y Sergio Hervás, que junto a jugadores menos habituales en la rotación como Carlos Sánchez rindiento a buen nivel, lograron ganar el parcial del tercer cuarto (13-16). La dinámica continuó durante el último parcial. Los locales, como equipo joven y de formación que son, no bajaron el pistón en ningún momento continuando compitiendo al máximo sin mirar el marcador, lo que hizo que los daimieleños también pudieran aprovechar esos minutos para dar confianza y ritmo a todos sus jugadores.
Al final se pudo competir durante los dos últimos cuartos y mejorar las sensaciones, muy importante para el siguiente partido frente a Liceo Francés. Duelo de nuevo clave para la permanencia, en lo que será la primera de las nueve finales que quedan.