Año tras año el Campus del CB Daimiel continua creciendo y mejorando gracias al trabajo de muchas personas que lo hacen posible.

En primer lugar quiero agradecer el trabajo de un grupo de madres que lleva ya mucho tiempo durante todos los campus y a lo largo de todo el año ofreciendo su ayuda desinteresada en las actividades que organizada el club. Bea, Virgínia, Teresa, Candi, Luisa, Juli, Inma y Raquel (que faltan en la foto). Una vez más muchas gracias por encargaros de que los chavales hayan podido disfrutar de una alimentación saludable y cuidar de ellos.

A la plantilla de monitores que vamos ampliando cada año y que durante este se han pegado un currazo enorme para que los chavales hayan crecido como jugadores y se hayan desarrollado socialmente dentro de un grupo magnífico. Gran trabajo de Pablo Villarejo como director y del resto; Juan Carlos, Antonio, Vanesa, Javier, David, Ángel, Diego, Laura, Álvaro, Daniel, Carlos y Javier Martín. Es un orgullo ver que tanto los que vienen por primera vez desde lejos, como la gente formada en el club, se implican como uno más de la familia del CB Daimiel.

A todos los directivos, volcados en la organización del Campus. A Javier Martínez de forma especial por sus increíbles reportajes que hacen que podamos tener un magnífico recuerdo de todas las activdades organizadas por el club. Y como no a las instituciones y patrocinadores que hacen posible que el baloncesto de Daimiel sea una referencia a todos los niveles.

Por último un emotivo recuerdo para una persona que lo ha dado todo por el baloncesto de Daimiel y que habría estado encantado, como en las ediciones anteriores, de poder formar parte de este Campus. Allá donde te encuentres, esto también es posible gracias a ti, David.

¡Gracias a todos!

El día más lúdico del Campus comenzó por la mañana con un entrenamientos que sirvió de refuerzo y puesta en práctica de los conocimientos adquiridos durante el Campus.

Ya por la tarde pudieron disfurtar de una fiesta con música y cañon de espuma que hizo las de una chavales totalmente entregados a la diversión. Los juegos, bailes y bromas tomaron el protagonismo en una tarde en la que evitaron las altas temperaturas con una fiesta que recordarán durante todo el verano.

Tras una ducha en casa, los chavales volvieron para la cena que la organización les tenía preparada. Justo después tomó protagonismo la velada nocturna y la “gimkana del terror”, en la que tuvieron que superar diferentes retos y acertijos por toda la extensión del complejo deportivo para avanzar y completar los objetivos. Pruebas y sustos adaptados a la edad de cada grupo que provocaron pequeños sustos y grandes sonrisas en cada uno de ellos.

Tras la gimkana se disputó el concurso de baile en la que por equipos compuestos por niños de todas las edades tuvieron que preparar un espectáculo que el exigente jurado de monitores valoró al más puro estilo “Got Talent”. A las 00:30 todos prepararon sus esterillas y sacos de dormir para pasar una estupenda noche con sus amigos en el pabellón.

Llegó el día del 3×3 al Campus. Una jornada totalmente centrada en esta nueva modalidad de baloncesto que cada día va ganando más adeptos y dando pasos de gigante hacia la profesionalización.

Durante la primera parte de la mañana se explicaron y se pusieron en prácticas las normas expecíficas, como el valor de las canastas (1 punto cada canasta y 2 puntos para los triples), el check ball,  salirse a línea de triple tras cambio de posesión, etc. Los chavales absorbieron rápidamente los conceptos y mantuvieron durante toda la mañana entenamientos específicos de cara al torneo nocturno.

Tras pasar las horas de más calor en la piscina, los niños hicieron acto de presencia en el pabellón para disputar el torneo. Se habilitaron 3 pistas en el Pabellón Municipal, una por categoría, en la que disputaron partidos a 10 minutos o 21 puntos que se disputaron al unísono con el tiempo en el marcador del pabellón. El magnífico ambiente que presentaba el pabellón, con las gradas llenas de familiares, acompañó en una noche de partidos muy competidos y sobretodo mucho baloncesto. El torneo finalizaba pasadas las 11 de la noche, dejándose las finales para disputarse el viernes en la jornada de clausura.

Gracias a niños y familiares por el maravillo ambiente vivido en el pabellón.

¡Sois los mejores!